No mucha gente sabe de mi pasión por el maravilloso tema de los ángeles, es algo que durante los últimos 3 años se ha vuelto algo muy importante en mi vida. De niña me gustaba mucho jugar sola y siempre me sentía acompañada, de alguna manera sabía que no estaba realmente sola, que había algo/alguien ahí conmigo, sin tener muy claro qué/quién era, pero me sentía protegida. Pasaron los años y olvidé esa conexión, esa compañía, hasta hace unos años cuando escuché claramente una voz que me prevenía de algo, y ese algo de lo que me advirtió la voz resultó ser real, lo pude comprobar. Al día de hoy me sigue impresionando la claridad con la que recibí el mensaje, como si literalmente alguien hubiera estado junto a mi y me lo hubiera dicho al oído, estoy segura que ese mensaje me lo dio un ángel.
A partir de ese momento me comencé a interesar mucho en el tema y quise aprender, saber más al respecto. Tomé un diplomado de terapia angelical en el que pude accesar a muchísima información sobre los arcángeles y ángeles, y por primera vez abrirme a sentir su presencia de una manera consciente, a practicar el recibir sus mensajes para mi y para alguien más. Después tomé 2 certificaciones avanzadas con Charles Virtue, el hijo de Doreen Virtue, autora de muchísimos libros sobre ángeles y una de las expertas más reconocidas a nivel mundial en ese campo, esas certificaciones internacionales te preparan para poder dar terapia angelical a otras personas con el fin de ayudarlas a recibir los mensajes de sus ángeles. Por la carga de trabajo que tengo normalmente, y también por desidiosa, no he comenzado a hacer mis prácticas para en un futuro cercano poder dar terapia, sin embargo todo lo aprendido y el abrirme a poder darme cuenta de las señales que los arcángeles y los ángeles me envían se ha vuelto parte de mi vida diaria. Los arcángeles y ángeles están con cada uno de nosotros, creamos o no en ellos, independientemente de nuestra religión, y sólo tienen permitido ayudarnos si se los pedimos, tenemos libre albedrío para querer o no su ayuda, pero ahí están, esperando a que les hablemos, listos para ayudar.
A raíz de mi problema de salud había querido que alguien me ayudara a canalizar los mensajes que necesitaba recibir de mis ángeles, quería que fuera alguien más quien me ayudara a recibirlos y decírmelos porque me cuesta hacerlo para mí misma, me es más fácil recibirlos para otras personas. Había estado buscando quien lo hiciera pero me queda claro que todo se acomoda solito, 2 terapeutas a quienes busqué no respondieron, y hace poco en Facebook vi que una de mis compañeras de la certificación, que vivía en Mérida, se mudó a la Ciudad de México, le escribí y pude verla el Sábado pasado. No saben qué maravillosa sesión!, los mensajes fueron claros y muy contundentes, de los temas que me preocupaban y de otros que yo creía que no necesitaban atención y en realidad requieren ajustes de raíz para desbloquear la energía y entonces puedan haber cambios importantes en mi vida.
Hablen con los ángeles, ahí están para nosotros, siempre, incondicionalmente, no estamos solos. Ya sea en sesión con algún terapeuta que sepa canalizar los mensajes, o pueden hacerlo hablando literalmente con ellos, pidiéndoles su ayuda en lo que necesiten. Ellos responden de muchas maneras, nos dan señales, ya sea en algo que leíste que justo te responde tu inquietud, o una imagen que viste "por casualidad" que te da una idea, o algo que escuchaste que es justo lo que necesitabas, sólo es cuestión de abrirte, poner atención y confiar en que su amor y su ayuda están ahí, contigo.
Quien quiera experimentar una sesión les dejo los datos de Mariana, con quien yo fui el Sábado, es una increíble terapeuta: https://m.facebook.com/Mariana-Espitia-179860818857024/
Espero muy pronto poder comenzar a dar terapias también, me emociona el tener la capacidad de ayudar a otras personas a recibir los mensajes de sus ángeles, a sanar cosas para mejorar sus vidas, es una hermosa misión en mi vida. 👼🏻💜🙌🏼✨
