jueves, diciembre 28, 2006

Bye bye 2006!!!

Siiiii, finalmente se va el 2006, que bien! No quiero sonar amargosa ni podría quejarme de el año a nivel profesional porque honestamente fue un año muy bueno para mí en cuanto a trabajo se refiere, pero la verdad a nivel personal el 2006 fue un año raro, muuuy raro, no sé bien como explicarlo pero es como si durante este año hubiera estado dentro de una especie de capullo aislada de mí misma esperando convertirme en algo... o algo así, el chiste es que este año es como si hubiera permanecido en pausa mientras miles de cosas sucedían dentro de mí y a mi alrededor, me refugié en mi oficina con el pretexto de trabajar y trabajar esperando que el año se fuera rápidamente, y aquí estoy, escribiendo esto el 29 de Diciembre, solo quedan 2 días, no hay plazo que no se cumpla.

¿Y ahora qué sigue?, normalmente en estas fechas estaría haciendo una laaaarga lista de propósitos que nunca cumplo y muchos deseos con tinta roja y otra de todo lo que ya no quiero en mi vida con tinta negra para quemarlas el 31 a la media noche y soplar las cenizas al viento esperando que el universo conspire..., pero hoy no estoy demasiado preocupada por hacerlas, planear mucho genera frustración, hay muchas cosas que no están en nuestras manos y al intentar controlarlo todo solo bloqueamos la energía y alejamos la posibilidad de cumplir nuestros deseos. Y además ¿quién dice que lo que estamos deseando es lo mejor para nosotros?, muchas veces las bendiciones vienen disfrazadas de maldiciones y en el momento hacemos berrinche, lloramos, sufrimos, nos tiramos al drama y cuando pasa el tiempo nos damos cuenta de que fué lo mejor que pudo pasarnos. Aferrarnos a algo nubla nuestra capacidad de observar las señales que la vida nos pone enfrente y termina por volvernos completamente ciegos, vivir obsesionados por algo o por alguien es una total y absoluta pérdida de tiempo, hay que dejar que las cosas fluyan y sobre todo hay que estar receptivos a lo que la vida nos ofrece, es muy probable que eso que no imaginamos y que hoy aparece frente a nuestras narices pueda ser aún mejor que lo que soñábamos.

No sé tú pero por lo menos yo tengo un muy simple propósito para este 2007: Apreciar lo que tengo. Apreciar mi vida, mi casa, mi familia, mis amigos, mi trabajo, apreciarme a mí. Podría seguir con los típicos propósitos de cada año: Leer más, tomar más agua, ir al gimnasio, comer sanamente, aprender italiano, dedicar más tiempo a mi familia y amigos, bla bla bla... pero ya hasta escribirlos aburre y leerlos al final del año y saber que no los cumpliste es muy deprimente, por eso este año no los escribiré, pondré mi energía únicamente en apreciar lo que hay, valorarlo y en estar receptiva a lo que hay a mi alrededor y que no he visto. Los humanos somos muy complicados y creo que la vida es mucho más simple, o por lo menos lo que realmente importa lo es. Dejamos pasar momentos increíbles por estar pensando en mañana, un mañana tan incierto, un mañana que no existe aún. Estamos pero no estamos del todo, hay que aprender a estar, estar al 100% porque si hay algo seguro es ese preciso momento que estas viviendo y no hay que desperdiciarlo. Muchos vivimos en una absoluta irrealidad producto de nuestra mente, de lo que creemos o de lo que queremos y pasamos de noche por nuestra propia vida, y como diría mi hermano Ro "no está chido"... VIVAMOS CARAJO!

Está increíble desear, está increíble soñar, es padrísimo hacer planes pero estemos abiertos a las opciones, a lo que no conocemos, a lo que no imaginabamos, a lo que nunca esperamos, la vida puede sorprendernos gratamente. No estoy hablando de conformarnos con lo que hay a la mano y ya, no, estoy hablando de ser flexibles y tener la humildad para aceptar que no lo sabemos todo y que podemos estar equivocados, que eso con lo que neceabamos tanto talvez no era lo mejor y que siempre podemos cambiar de opinión. Suena trillado pero es cierto, vivamos cada día como si fuera el último, dejemos de perder tiempo preocupandonos por lo que "podría pasar", no ha pasado y es probable que no suceda y si sucede pues ya tendremos la oportunidad de resolver. Utilicemos el tiempo, el hoy, en vivir, en amar, en hacer, en hablar, en comer rico, en reirnos, de mañana ya nos ocuparemos cuando sea el momento. Y lo más importante, dejemos de preocuparnos por lo que opinen los demás, de cualquier manera nunca queda uno bien con todos, seamos congruentes con nosotros mismos y ya.

Como dicen en una película que ví este año y que amé "Efectos Secundarios":
- Haz una lista de todo lo que no te gusta de ti y luego tírala. Eres el que eres. Y después de todo, no es tan malo como te imaginas un domingo de cruda.
- Tira el equipaje de sobra. El viaje es largo, cargar no te deja mirar hacia delante. Y además jode la espalda.
- Besa a tantos como puedas. Deja que te rompan el corazón. Enamórate, Date en la madre, y vuelve a levantarte. Quizás hay un amor verdadero. Quizás no. Pero mientras lo encuentras, lo bailado ni quién te lo quita.
- Equivócate. Cambia. Intenta. Falla. Reinvéntate. Manda todo al carajo y empieza de nuevo cada vez que sea necesario. De veras, no pasa nada. Sobre todo si no haces nada.
- Prueba otros sabores de helado. Otras cervezas, otras pastas de dientes.
- Arranca el coche un día, y no pares hasta que se acabe la gasolina.
- Empieza un grupo de rock. Toma clases de baile. Aprende italiano. Invéntate otro nombre. Usa una bicicleta.
- Perdona. Olvida. Deja ir.
- Decide quién es imprescindible. Mientras más grande eres más difícil es hacer amigos de verdad, y más necesitas quien sepa quién eres realmente sin que tengas que explicárselo. Esos son los amigos. Cuídalos y mantenlos cerca.
Bienvenido al resto de tu vida!

Como cierre de este post quiero dar algunos agradecimientos, si, así como en los cd's jajaja y el motivo es que con los últimos segundos del 2006 se cierra una etapa de mi vida, como si estos 27 años se hubieran escrito en un libro de esos chingones de pasta gruesa y toda la onda pero que ya se le acabaron las páginas, y como voy a comenzar a escribir en uno nuevo pues quiero despedir este agradeciendo a las personas que fueron y a las que son importantes para mí y que contribuyeron de alguna manera a escribir cada capítulo, aquí voy:

Primero que nada quiero agradecer a mi mamá, qué mujer más valiente que se aventó al ruedo con 3 chavitos y sola, que paquete!, mis respetos ma, te adoro y te admiro, pa lante siempre juntos. A mi abuelita Conchita que es un ángel en mi vida, aunque tu mente a veces parezca que no recuerda, yo sé que vivo en tu corazón, y tú viviras siempre en el mío, eso es lo que importa, te adoro gordita hermosa. A mi hermano Rodrigo por ser el compañero de mi niñéz, yo sé que la vida son ciclos pero te extraño en verdad, te quiero muchísimo y te necesito cerca. A mi hermana Jimena por existir, por ser mi cómplice y mi amiga, te quiero un chingo carnalita. A mi cuñada March por amar y cuidar a mi hermano, eres una niña increíble. A mis primos, a Linda (gracias por confiar en mí), Marifer (felicidades!), Luis (mi hermano), Chacho (te extraño), a mis tíos, sobrinos, familia en San Luis Potosí, familia en otros estados y países, familia política (mención especial a Gerardo, primo cubitas eres poca madre, gracias por adorar a mi prima). A mi papá, donde estés, porque finalmente participaste en que yo exista.

A Mr. P por compartir muchos años de mi vida, por lo que aprendimos juntos, y por continuar sacandome unas buenas carcajadas "Distrazate de maíz pa que te piquen los pollos" jajaja, me caes bien wey, neta. A E.I. por los momentos tan mágicos que fueron muchos, siempre tendrás un lugar en mi corazón, te recuerdo mucho. A Paco, Rudy, Gustavo, Iguana y Pau, que más que amigos son hermanos, sé que puedo contar con ustedes, me escuchan, no me dejan caer, los quiero, gracias por tanto cariño!, a Lisa, Johanna, Juan Ma, Rodrigo, bienvenidos a mi vida. Leonel Castellanos, siempre estás ahí, que suerte conocerte, te quiero y admiro mucho. A Vivi, la distancia no importa cuando hay cariño. A mis compañeros de WestWood, a los que siguen ahí, a los que ya no están, porque de cada uno he aprendido algo, incluso de los que me la han puesto difícil jajaja. A cada uno de mis amigos del staff y amigos músicos con los que viajo, bailo, canto, me divierto horrores; admiro su trabajo y los quiero chicos, cada uno sabe a quien me refiero y creo que a cada uno le he dicho que lo quiero en vivo y a todo color.

Dew, eres jefe, amigo, cómplice, te admiro, te respeto, te quiero mucho y siempre te voy a agradecer la oportunidad, que gran equipo somos. Pablo Vega, que enorme gusto conocerte, bienvenido a México!, te escucho y te aprendo, eres un chingón. Mario Domm, gracias por las conversaciones, por tirarnos tan buena onda a mí y a mi familia, por la música, por con tus letras recordarme que sí creo en el amor, nomás me hago wey jajaja. Pablo Hurtado por tu cariño, por los detalles, por los momentos, que bien tenerte cerca fanssssss. A Barbie, Gaby, Pablo Holman, Tomás, Natalia, Alonso, Mandusi, Fer, Joy, Jesse, cada uno sabe lo especial que es para mí.

A todos los amigos que he tenido a lo largo de estos 27 años, a los del Boston, a los del CIE, a los de Televisa, a los de Vaselina, a Connie Miramontes, al Sr. Efraín Padilla q.e.p.d. (recuerdo sus helados con mucho cariño, gracias por tantos Domingos), a los de Rac, a mis empresarios, a mis cuates del Barney's, a los del Pedro Infante no ha muerto jajaja, a todas y cada una de las personas que me han sacado una sonrisa o que me han regalado una, a las que han mandado un mensaje de texto a mi celular cuando menos lo espero, a las que me han querido, a las que me han hecho sentir algo, a las que me han ayudado, de las que he aprendido, con las que me he divertido, gracias a todos neta, gracias de corazón.

Adiós 2006, gracias por el aprendizaje... Bienvenido 2007, ya tengo el libro nuevo y muchas ganas de escribir!

martes, noviembre 14, 2006

Y tú ¿qué quieres creer?

Este fin de semana ha sido sin duda muy importante para mí en cuanto a aprendizaje se refiere, en poco tiempo y sin proponérmelo logré entender algo que había estado leyendo en muchos libros y discutiendo con mi familia y amigos pero que tenía que vivirlo para poder terminar de entenderlo... la importancia de CREER.

El poder de la mente es algo que me asombra en verdad y siempre me ha interesado leer sobre ello pero pocas veces había tenido ejemplos tan claros de como lo que creemos hace que las cosas sucedan, la energía que ponemos en los pensamientos es más importante de lo que suponemos.

Yo solía ser muy pesimista y veía todo negro ya por inercia, me había etiquetado con "no puedo" en muchas situaciones y así transcurrían mis días, sin novedad. Si algo malo me pasaba yo pensaba "obvio", si algo bueno me pasaba pensaba "debe haber un error" jajaja, ¿suena familiar?, es horrible ¿no?. Hace unos meses tuve un día muy malo, de esos que despiertas y no entiendes nada, te sientes mal, de malas y crees que el universo conspira en tu contra. Era Sábado, me levanté de la cama muy tarde, hacía un frío horrible pero me tuve que salir a la calle porque tenía que ir a pagar una tarjeta a Perisur. Todo el camino a Perisur iba pensando que algo malo iba a pasar, estaba entre triste, enojada, confundida y el pensamiento fatalista continuaba rondando. Llegué a Perisur y me puse el ipod para que nadie me hablara bajo ninguna circunstancia (solo la cajera de Palacio de Hierro cuando pagara, obvio), pagué y decidí buscar en Mix Up la primera temporada de Grey's Anatomy, caminé hacia la tienda y mientras escuchaba música pensaba que era el día más horrible del mundo y que nada bueno podría pasar, llegué a buscar el dvd y sí, efectivamente la que me atendió me trató muy mal, tal como yo lo imaginaba... La cosa no paró ahí, antes de irme vi que en Zara Home había ofertas y entré para ver si tenían un portaretratos muy lindo de metal que había visto en otra ocasión, seguía enojada y deprimida, me acerqué a la repisa donde estaban los portaretratos y mientras veía el precio del que me gustó una chica se acercó y tomó uno que estaba junto, lo regresó a su lugar y esto provocó que el último portaretratos de la fila del que yo estaba viendo se cayera hacia adelante generando una reacción en cadena de 6 portaretratos que terminó con la esquina de uno enterrada en mi cara, el metal me abrió una herida arriba de la boca que no era tan grande como aparatosa, salía sangre, mucha sangre y yo pensé "claro, esto tenía que pasarme a mí". Estoy segura de que lo que creemos es energía y si nos la pasamos pensando en cosas fatalistas pues es muy probable que estas cosas sucedan. No es mala suerte, nosotros jalamos las cosas con nuestros pensamientos.

¿Cuántas veces nos han dicho que creamos que cosas buenas nos van a pasar o que vamos a lograr algo y nos hacemos como que sí creemos pero un pensamiento negativo dentro de nosotros nos sabotea y hace que no lo creamos realmente? No vale hacer como que creemos o pensar "ojalá logre tal cosa", ese "ojalá" ya nos programó a no lograrlo. Yo no creía del todo esto que hoy escribo pero el Domingo tuve la oportunidad de vivirlo y aquí lo resumo:

Paco, uno de mis mejores amigos, hermano del alma, se inscribió en la carrera Nike 10K, yo no lo sabía, me enteré cuando mi hermana, Jimena, me dijo que ella también ya se había inscrito y que quería que yo también me inscribiera. Mi primera reacción fué pensar que estaban rematadamente locos pero cuando mi hermana me mandó el link donde podía inscribirme lo hice sin pensarlo mucho, "no voy a correr ni 1 km pero voy a acompañarlos" pensé. El Sábado fuimos a recoger las camisetas y el chip, de ahí me fuí a comer con Paco y estuvimos comentando sobre la carrera, yo todo el tiempo me la pasé diciendo que me iba a salir pronto, que los veía en la meta, el pesimismo en pleno. En la noche, en casa de mi mamá, Jime y yo sacamos las camisetas y en la parte de atrás traían un espacio para escribir algo, arriba decía "Cuando llegue a la meta voy a..." y cada quien ponía algo, yo escribí "Internarme en un hospital... jajaja Lo lograré? Ojalá!!!", y antes de irme a dormir le dije a mi mamá que me iba a llevar el celular para llamarla cuando tirara la toalla.

Al otro día me desperté a las 6:00 am, me metí a bañar, me puse mis pants y me fuí con Jimena a la salida de los que traíamos el brazalete blanco, el de hacer la carrera en más de 60 minutos. Había muchísima gente, muchos se veían muy deportistas y me empezó a entrar el miedo de sentirme mal ya en la carrera, o que me dieran ganas de ir al baño, o tropezarme... PESIMISMOOOO!!!
Paco llegó justo antes de que nuestro grupo comenzara a correr y nos lanzamos a la aventura, los primeros 3 kilómetros me la pasé entre trotando y caminando rápido y quejándome porque necesitaba encontrar un baño, incluso le dije a Paco que en el kilómetro 3 me iba a salir, pasando el área donde daban agua Paco siguió corriendo y yo bajé la velocidad un poco pero no me salí, iba pensando en donde me convendría salirme para que fuera más fácil llegar al ángel, cuando me di cuenta ya estaba en el kilómetro 4 y no estaba cansada, seguí y me encontré con mi hermana, corrimos juntas un rato. Detrás de nosotras venía corriendo un señor de unos 60 años que gritaba "vamos, si pueden, no paren, aunque sea cortito pero sigan", escucharlo nos motivaba mucho y poco a poco mis pensamientos cambiaron y me descubrí pensando "sí puedo, la voy a terminar y voy a ver a Paco y a Jime en la meta", lo creí realmente y corrí 10 kilómetros, yo, Gisa, la que se la pasa sentada en un escritorio muchas horas al día y no logra llegar al gimnasio, la que pensaba siempre "yo no puedo", yo, lo logré! De verdad en el momento en que dejé de pensar que no podría hacerlo comencé a tener más energía y seguridad en que lo lograría y así fue, llegué a la meta en 1 hora 18 minutos y 29 segundos y la sensación de felicidad cuando crucé ese marco amarillo fue increíble. No se trataba de ganar un premio, ni de demostrarle algo a alguien, no había nadie esperándome ahí, llegué sola y solo me demostré a mí misma que puedo lograr lo que yo quiera, gané seguridad en mí misma, el mejor premio. Mi único enemigo era el pesimismo y esos pensamientos negativos que me estaban estorbando, ya me deshice de ese equipaje, pesado por cierto...

Ese Domingo fue un gran día, talvez para muchos esa carrera podría ser algo no tan importante, pero para mí fue una gran experiencia interna y compartirla con 2 de las personas más importantes en mi vida fue muy chingón. Solo se trata de CREER, de verdad.

martes, noviembre 07, 2006

Viajes como este...



Después de un año de mucho trabajo me fuí de vacaciones... en realidad me fuí de gira pero me lo tomé como unas merecidas vacaciones y la verdad es que si así fuera el trabajo siempre pues ni se sentiría el cansancio, qué gran viaje!!!
 
Unos conciertos en Panamá, Guatemala y El Salvador fueron el pretexto para juntar a un grupo de grandes personajes que ya extraño, personas talentosas, divertidas, complices de días divertidos e inolvidables, amigos...
 
Desveladas y desmañanadas que ni se sentían por las ganas de estar y seguir compartiendo, risa de esa que hace que te duela el estómago y se te salgan las lágrimas, de la que te hace sentir como de 15 años en un viaje con tus amigos de la escuela. Sobremesas, largas conversaciones, música, gritos, emoción con el éxito de cada show y el gran equipo que se formó.
 
Bárbara, tanta ternura y tu carita de emoción con las mañanitas en la puerta (con guitarras y toda la cosa), pastel de chocolate y un montón de sujetos en pijama y gorritos de fiesta haciendote saber que te queremos mucho. Gaby y esa chispa interminable, a comer cereal con las colombianas de fondo musical, porqué no???, original!. Tomás, que increíble niño, esa inocencia es invaluable, te debo Panic! at the disco. Pablito... mierda!!!, genial, no hay más que decir, te adopté. Pablo V. te admiro en verdad, lo sabes, que bonita familia tienes, gracias por dejarnos entrar en ella a mí y a Jime.
 
Robert, más giras de estas! no amigo???. Chicarcas, weyyy eres mi ídolooo ("Señores el viático no es un ingreso" jajaja). Luis, tipazo y cómo suena!!!. Armandito, siempre es un gusto. Poncho, que divertido eres hombre!!!. Roberto, no tenía el gusto de conocerte, ojalá sea la primera de muchas ehhh!. Blu, el showman, que manera de rockear... Fito: cantameeee!!!, me caes poca madre. Gus, morro no me digas tanto que me vas a volver insoportable jajaja, que lindo cantas y que chida actitud, bienvenido al D.F. Miguel.com, el buffet de el Radisson es la onda verdad???. Daniel, a poco no rockean los Kudai jajaja, te dije!
 
Mario, que chidas pláticas, que buen vino, que talentoso eres, te quiero Domm! Samo, me encanta tu rollo, que lindo cantas y tus sombreros son la neta jaaa. Mike, que placer viajar con ustedes. Pablo Hurtado, Pablo Hurtado... que rico hueles carajo! jajaja, 5:00 am... maldita alarma, y si, soy tu fansss.
A todos mis compañeros de viaje LOS QUIEROOO!!!
 
Ojalá hayan más viajes como este...

martes, octubre 17, 2006

A 10,000 pies de altura




 
El Viernes pasado viajé a Chicago a un show que vendí, tenía tantas ganas de ir, de salir de la ciudad, de terminar con la rutina... El llamado en el aeropuerto fue muy temprano, 6:30 am, casi no había dormido por terminar pendientes del trabajo y hacer mi maleta (odio empacar!!!), así que llegué en calidad de zombie al counter de Aeroméxico a reunirme con mis compañeros de viaje, documenté mi maleta y me compré un café mocha grande extra hot con mucha canela de Starbucks para poder mantenerme en pie y lograr las tan esperadas compras del duty free. Por suerte encontré todo lo que buscaba rápidamente y me dirigí a la sala de espera con buen tiempo para abordar, ahí tuvimos un momento de pánico que me hizo olvidar el sueño por un rato cuando mi querido amigo Luis Fer perdió en el camino a la sala su pase de abordar y amenazaron con no dejarlo subir al avión si no aparecía... después de vocearlo por todo el aeropuerto y de un Luis Fer angustiado recorriendo el pasillo una y otra vez el pase apareció y pudimos abordar sin problema.

A diferencia de las anteriores giras me tocó un asiento lejos del resto de mis compañeros, el 6A, primera fila de la clase turista, ventana, por suerte. Me entregaron las compras del duty free (con maleta de regalo, yes!), las guardé arriba de mi asiento y me acomodé en mi lugar preguntándome qué tipo de persona me tocaría sentada junto las siguientes 4 horas... "Por favor, que no sea alguien que ronque, ni que hable mucho" pensé algo malhumorada y el avión siguió abordándose sin noticias del dueño o dueña del 6B. En el asiento 6C se sentó un señor muy trajeado, con un libro grande en mano y muy serio, el avión terminó de abordarse y el asiento 6B quedó vacío lo cual me pareció una gran noticia. Las pantallas bajaron y comenzó el video de medidas de seguridad del avión, cerré lo ojos esperando lograr conciliar el sueño antes del despegue (me aterran los despegues y los aterrizajes... mucho más las turbulencias... en resumen, volar no es lo mío), pero no logré dormirme.

Me asomé por la ventana y todo debajo se veía cada vez más pequeño, sonó la voz del piloto "10,000 pies de altura", no le dí importancia, yo solo pensaba en el momento en que escucharía la maravillosa frase "a partir de este momento pueden utilizarse computadoras y reproductores de música..." (o como digan, el chiste es que ya podría prender mi ipod que tan esmeradamente mi hermana llenó horas antes con mis canciones favoritas), saqué el ipod de mi bolsa, hice una lista de unas 10 canciones "para dormirme" y cerré los ojos ahora sí esperanzada de caer en un sueño profundo y reparador... no sucedió. Ni Jason Mraz, ni The Fray y mucho menos Scissor Sisters lograron arrullarme y así estuve haciéndome wey durante hora y cuarto hasta que llegó el desayuno. "¿Huevo o Chilaquiles?" que decisión... maldita dieta... ok Chilaquiles!, me los comí con culpa y en automático y me dije "sí, era lo que necesitaba, comer, llevo días comiendo muy mal, seguro después de comer algo lograré dormirme". Recogieron la bandeja con el muffin que mi fuerza de voluntad logró ignorar, tomé una almohada, puse una de Sarah McLachlan lenta, muy lenta y cerré los ojos, escuché que las pantallas bajaban y la voz del hombre elegante del 6C (durante el desayuno pude ver de reojo que leía un libro en inglés sobre ortopedia y nunca estuve segura de si era mexicano o extranjero pero en este momento hablaba español y me pareció que se dirigía a mí), no hice caso y seguí con mis fallidos intentos de dormir, la voz volvió a escucharse y abrí los ojos, el hombre me miraba y preguntaba amablemente si iba a ver la película acercándome unos audífonos, "No sé si ya la vi" respondí como entre sueños, sonrió y agregó "The devil wears Prada, deberías verla" (pensé "¿qué no ve que estoy tratando de dormir?" pero tomé los audífonos y me los puse, "si está aburrida pues me duermo, total mi mamá y mi hermana quieren verla y luego la veo con ellas"), la película comenzó...

Durante las siguientes casi 2 horas de película no me dormí, la vi entera y me hizo pensar bastante (agradezco al señor la amable sugerencia de verla, las cosas pasan por algo, siempre). Todo el tiempo está uno tratando de pertenecer a un grupo de personas, a un ambiente, de parecerse a alguien o encajar en un molde "aceptado" y terminas olvidándote de ti, de tu escencia, de tus sueños. Puedes tener el mejor trabajo del mundo, que ames y te encante hacerlo y además te paguen por hacerlo pero si no enriqueces tu vida con lo verdaderamente importante, con lo interno, con amor, con lo que te hace vibrar... lo demás pierde importancia. No puedes sustituir la vida con 4 o 5 horas más en un escritorio, la vida no transcurre en unos cuantos metros sin ventana y una computadora. Lo que haces no puede definir quien eres, solo es un rol, no lo es todo. Evadirse no sirve de nada, hay cosas que no pueden sustituirse y el intentar hacerlo hace daño. ¿No debería ser nuestro proyecto más importante ser felices?, ¿porqué llegamos al punto de olvidarnos de nosotros mismos y actuar en automático?, ¿vale la pena sacrificar lo que queremos hacer por quedar bien?, nunca queda uno bien del todo, debería ocuparnos el quedar bien con nosotros mismos y punto. Sí, dar lo mejor siempre, sí, ser responsables, pero jamás poner a nadie ni a nada por encima de uno, eso es lo principal. Saber lo que uno vale sin importar la opinión de los demás, vivimos en una sociedad, es verdad, pero basar nuestra seguridad en opiniones externas nos puede llegar a volver locos, llegamos al mundo solos, nos vamos de este mundo solos, no podemos vivir dependiendo de nada ni de nadie, hay que liberarse de tantas tonterías y volver a la escencia...

Miré por la ventana, dieron el anuncio de subir el respaldo del asiento y el avión comenzó su descenso. Seguí con el diálogo interno, descifrando el porqué de tanto cansancio, tanto silencio, tanta apatía, tantos hubieras y tanto sabotaje, preguntándome qué podría renovar mi capacidad de asombro, darme un poco de luz y romper de una vez por todas con esta pinche monotonía. En el clímax de los porqués sonó nuevamente la voz del piloto "10,000 pies de altura", se hizo un silencio en mi mente y miré por la ventana, debajo del avión todo eran nubes muy blancas, más abajo se lograba percibir un mosaico verde, arena y marrón, cuadros perfectamente delineados que se definían mejor cuanto más descendíamos. Una hermosa ciudad comenzó a aparecer en el paisaje, grandes edificios a la orilla de un enorme lago, el sol lo hacía parecer de un color turquesa increíble. El avión voló por encima de los grandes edificios y giró sobre el agua para regresar hacia el aeropuerto, yo no parpadeaba, no sé si por el exceso de cansancio (había dormido 1 hora y media del Jueves al Viernes) que ya más bien había dejado de importarme o por lo que esta imagen me hizo sentir, tanta belleza, el agua tan en calma, el cielo tan azul... mis miedos e inseguridades tan pequeñas en comparación. Y ahí, de la nada, a miles de pies de altura, descendiendo a la tierra con un poco de turbulencia, mi fé y mi capacidad de emocionarme hasta las lágrimas dieron destellos de vida y me sentí libre.

viernes, septiembre 22, 2006

Even Angels Fall


Even Angels Fall
by Jessica Riddle
album: Key of A Minor (2000)

You've found hope, you've found faith
Found how fast she could take it away
Found true love, lost your heart
Now you don't know who you are
She made it easy, made it free
Made you hurt till you couldn't see
Sometimes it stops, sometimes it flows
But baby that is how love goes

You will fly and you will crawl
God knows even angels fall
No such thing as you lost it all
God knows even angels fall

It's a secret no one tells
One day it's heaven, one day it's hell
It's no fairy tale; take it from me
That's the way it's supposed to be

You will fly and you will crawl
God knows even angels fall
No such thing as you lost it all
God knows even angels fall

You laugh, you cry, no one knows why
But Oh the thrill of it all...
You're on the ride, you might as well
Open your eyes

You will fly and you will crawl
God knows even angels fall
No such thing as you lost it all
God knows even angels fall
Even angels fall
Even angels fall

martes, agosto 08, 2006

Disfrutando


  • A menudo me descubro pensando en las cosas que no me gustan de la vida, en lo que quisiera cambiar o en lo que según yo "me hace falta" para ser "totalmente" feliz pero este fin de semana quise cambiar el cassette y hacer una lista de las cosas que disfruto de la vida, las más sencillas, las verdaderas, simplemente para recordarlas y valorarlas, talvez así el ritmo de la vida no logre que se me pierdan de vista otra vez:
Esos minutos por la mañana cuando abro los ojos y descubro que me le adelanté al despertador y puedo dormir de nuevo.
El olor de un buen incienso.
Un abrazo de esos eternos...
Palomitas grandes en el cine con salsa valentina y limón (en un vasito, claro, porque si no se remojan ja!)
Cantar sola y a todo pulmón en mi coche de regreso a casa por la noche ("High" de James Blunt y "Blind" de Lifehouse han sido muy inspiradoras últimamente)
Un café moka extra hot con crema batida y canela en polvo de Starbucks cuando el día está triste y gris.
Reírme a carcajadas hasta que me duela el estómago con los chistes de mi hermana.
Largas pláticas en la carretera.
Tirar una chuza festejada por mis mejores amigos (los extraño!).
Mi cama recién cambiada y oliendo riquísimo.
Dormirme totalmente exhausta después de un exitoso concierto.
Comprar flores para mi casa.
Las navidades con mi familia: deliciosa cena, grandiosa compañía, tradición invaluable.
Cada capítulo de Grey's Anatomy.
Tomar muchas muchas fotos en los viajes y fiestas.
Vino tino y buena conversación.
Escuchar a mi abuelita cantar con tanto sentimiento.
Esas películas donde el universo conspira para que el amor se realice (no puedo evitarlo, me fascinan!)
Viajar y caminar por horas.
La liberación que regala el perdonar.
Largas tardes de Domingo con pizza y películas.
Las noches de Karaoke.
Un beso de esos profundos y estremecedores...
Un baño de agua caliente, relajante (Sarah Mc Lachlan de fondo musical).
La luz que dan las velas.
Esas flores que crecen libres en la orilla rota del escalón de mi patio.
El olor a galletas recién hechas.
Mi pijama de franela cuando hace frío.
Enamorarme.
Las sonrisas de mis sobrinitos cuando me ven.
Oler rico.
Un buen concierto de esos en donde la música entra por cada poro (Depeche Mode, buen ejemplo).
La comida que hace mi mamá.
Que me duela todo porque logré ir al gimnasio.
Atardeceres multicolores y noches llenas de estrellas.
Regalar algo a los que amo.
Los reencuentros.
Un beso de buenas noches (o de buenos días).
Que no llueva.
Ver crecer día a día las plantas de mi patio.
Llenar mi ipod con mis canciones favoritas.
Tu recuerdo aunque no estés.
Escribir y escribir.
Esa sonrisa...

viernes, julio 21, 2006

Todo cambió

En este mes estoy cumpliendo 4 años de haber tomado una de las decisiones más importantes de mi vida, de haber agarrado valor y emprender, junto con una persona a la que quiero y admiro, que creyó en mí y a la cual estaré eternamente agradecida porque más allá de un jefe ha sido familia, amigo y cómplice (Gracias dew!), una gran aventura: el desarrollo del área de booking de una compañía de management que apenas comenzaba. Hoy, 4 años después (qué rápido se va el tiempo!) miro hacia atrás y me doy cuenta que no solo la compañía, el área de booking y el número de personas trabajando aquí ha crecido... yo sin duda lo he hecho, tanto laboral como personalmente. Llegar aquí me cambió la vida, me acercó a personas increíbles de las que he aprendido mucho, me hizo más segura, más humana, más responsable. Los viajes, los amigos, la música, tantas experiencias, las desveladas, los conciertos, el estrés, mi independencia.

Y hablando de mi trabajo y para los que no conozcan a los 3 chicos de la foto, les platico: Hace mucho que no encontraba un disco en español al que no le adelantara a ninguna canción y que me llegara tan profundo, hasta que apareció Camila. No soy músico y tampoco crítico de música pero la música es indispensable en mi vida, la escucho a diario y es parte importantísima de mi trabajo y puedo decir que verdaderamente este grupo es increíble. No sé si son las letras de las canciones, si es la música, si es la voz, si es su vibra o es todo en conjunto lo que logra ese resultado pero vale la pena descubrirlos. Sus canciones definitivamente te hacen sentir algo y son de las que puedes utilizar para crear el soundtrack de tu vida, ya sabes, las que te hacen recordar aquel amor, ese viaje en carretera, esa despedida... Hay que escucharlos en vivo, el disco es perfecto pero en vivo puedes disfrutarlos mucho más, son muy talentosos, humanos y de verdad es un placer poder trabajar con ellos (este es uno más de los motivos por los que amo mi trabajo).

Gracias Camila, gracias Mario, gracias Pablo, gracias Samo por recordarme el porqué decidí que esta era mi vocación, por esta música maravillosa y por permitirme ser un conducto para hacer que le llegue a la gente como mejor saben hacerlo... en vivo.

jueves, julio 20, 2006

Hoy decidí...

Hoy decidí...

Dejar de añorar el pasado, dejar de preguntarme ¿porqué?, dejar de lamentarme y aceptar que la vida es una recopilación de momentos, instantes o incluso días a los que no debes aferrarte y que, aunque vivirán para siempre en la memoria y en el corazón, es sano dejarlos ir. Momentos felices, momentos tristes, que existieron, que son parte de quien eres hoy. Momentos que vale la pena atesorar como en un álbum de fotos al que puedes recurrir cuando te den ganas de recordar, de entender cómo llegaste hasta el día de hoy, pero que no deben impedirte vivir el presente. Sí, reíste, también lloraste, sí, heriste, y sin duda te rompieron el corazón pero eso quiere decir que amaste y te arriesgaste, y valió la pena ¿no?. Sí, te equivocaste pero no hay tiempo de arrepentirse, solo hay que aprender de eso, la vida sigue, errar es de humanos y perdonar (y perdonarse) engrandece el alma. Sí, te enamoraste y un sentimiento hermoso invadió tu corazón (y seguramente le ocurrió lo mismo a la otra persona, o talvez no, no importa) todo era perfecto, y en realidad sí lo fué... para tí, en ese momento. Nada es permanente, todo cambia, cambia el mundo, cambia la gente, tú no eres el mismo de hace 10 años, no eres el mismo de ayer. Todo se trata de ciclos, de encuentros, de despedidas, de instantes maravillosos. Pero no des nada por hecho, la vida es un misterio. No puedes controlarlo todo, no puedes controlar los sentimientos, ni los tuyos, ni los de los demás, pero puedes tener fé en que todo pasa por algo y disfrutar al máximo lo que hay, cada momento... hoy.

Hacer este blog, y dejar aquí las frases que me hacen (o han hecho) sentir algo, las historias, las canciones, la gente que quiero, las fotos de aquellos "momentos", llenarlo de mi... y continuar con mi presente, preguntandome ¿qué sigue?